Ya ha pasado una semana desde aquella fatídica derrota
contra el atleti que sacó a relucir todos los defectos del Madrid de Ancelotti.
Y pensando en ellos el último que se viene a la cabeza es el debate Iker-Diego
que tanto se lleva hablado desde abril. Más que nada porque Diego López
demuestra en cada partido que no existe tal debate.
Hay pocas cosas en común en los madridistas, pero lo poco en
lo que la mayoría coincidimos es en que
este estilo de juego no nos favorece para nada. Es imposible entender
como teniendo a balas como Cristiano, Bale(ahora lesionado), Di María o Isco,
se juege al toque. Un estilo en el que el Madrid se ahoga. El Madrid está dislocado al tener a todos los jugadores
cambiados de lugar. Di María teniendo que centrar de rabona, Isco asfixiado en
banda izquierda, Cristiano sin espacios por el centro y Bale jugando por la
derecha.
Además en el mediocentro aun esperamos al mariscal, Xabi
Alonso y que sin él, Modric ha tomado el mando, siendo de los pocos que juega
el balón con criterio. Por lo demás ni Khedira está tan TOP como los 3 años
anteriores, ni Illarra está haciendo valer la cláusula pagada a la Real,
cuestión de paciencia, espero.
Por último, la defensa es sin paños calientes, un circo. Un circo en el que un chaval de 19
años que viene de no jugar en 5 meses, vuelve para ser el mejor y hacer mejores
al jugar a su lado a la dupla Pepe-Ramos que hace poco más de un año era la
mejor pareja de centrales del mundo. Quien la ha visto y quien la ve.
Lo que más me preocupa es la escasa capacidad de reflexión que está
mostrando Ancelotti al no cambiar su criterio . No cambiar su propuesta de
“fútbol espectacular”, su empecinamiento en esperar al Benzema que hace más de
un año no se ve y en no dar oportunidad a Morata que teniendo mucho menos
calidad que el francés ha mostrado (sin duda) más sangre, como también lo es su
idea de sacar o los dos laterales defensivos, o los dos ofensivos. Nunca
alternándolos.
Ancelotti ha querido darle su toque a este Madrid, usando el
tópico que muchos criticamos hace no tanto, en el que el buen fútbol se hace
con la posesión del balón. Nada más lejos de la realidad, ¿Dónde queda aquel
futbol directo que enamoraba? Esos cuatro, cinco toques a un lado y otro en
plena galopada, un centro rápido al corazón del área ,un remate certero al
fondo de la red y las defensas rivales preguntándose como coño han marcado si
hace 15 segundos era corner a favor. Y todo esto con los mismos jugadores, sin
Özil pero con Isco y Bale.
No me bajo del barco, Carlo. Pero necesitamos ver al menos
una idea de juego firme, una base a la que agarrarnos, aunque se pierda. Y si
tu propuesta no funciona, digo yo, que habrá que cambiar algo. No todos los
partidos los va a sacar la casta (y porque no decirlo, los huevos de Cristiano)
como en el Ciutat de Valencia
Paciencia y dejemos pensar a la ceja.
¡Hala Madrid!
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