Jueves, 16 de Enero de 2014. 17:30 P.M.
Una tarde normal y corriente se venía en mi existencia tuitera, un par de conversaciones pendientes y nada que hacer. Bueno, sí. Piqué había expulsado su enésimo deceso bucal y me estaba echando unas risas con varios tuiteros a su costa, pero eso es otro tema diferente al que nos concierne.
Saltó la noticia: Ancelotti había concedido una entrevista a 'Gulf news' en la que confesaba que se arrepentía de permitir la salida de Mesut Özil del Club de Chamartín. Algunos tuiteros se apresuraron a lanzar sus opiniones, algunas bastante hirientes, sobre Carlo y sus declaraciones. Servidor y otros eligieron la prudencia, una de las virtudes a tener en Tuiter, en mi opinión.
En la espera de conocer si esta entrevista era real o por el contrario se trataba de un bulo, a las 18:25, Joaquín Maroto, uno de los lacayos de Relaño, publicaba la supuesta entrevista. No se molestó en contrastar si era cierta. NO LO ERA.
Para bien de la salud del aficionado madridista, a las 18:35, tan sólo 10 minutos después del patinazo de Maroto (uno de tantos), Alberto Pereiro, periodista de Onda Cero, tuiteaba que la entrevista a Carlo nunca se produjo. Y así varios medios de comunicación. Pero al Grupo PRISA esta vicisitud, la verdad, como que se la traía al pairo, básicamente.
Media hora después de que Pereiro y otros compañeros confirmaran la falsedad de la noticia, otro lacayo de PRISA, el iluminado de Matallanas, volvía a insistir en la veracidad de la entrevista publicada anteriormente por Maroto (el de la moto). Les daba igual que fuera mentira, algo que sabían. El daño al entorno blanco ya estaba hecho.
En esas que el jefe de prensa, Carbajosa, mandó varios comunicados a los medios: "Lamento comunicarles que la entrevista a Carlo por parte de Gulf News nunca se ha realizado", cosa que a PRISA y su entorno de santones del balompié siguió importandole un santo pimiento, pues aquella noche en el programa de Héctor Fernández, Santi Segurola (ese hombre mayor cuya jubilación debió hacerse efectiva hace años) se dedicó a derramar bilis sobre la salida de Özil sin demora. Eso sí, Héctor Fernández le reprendió apuntándole que la entrevista era falsa, le aplaudo por ello.
Prosiguiendo esta 'sagrada' campaña de desprestigio, Maroto intentó justificar su información opinando que no sería muy descabellado pensar que Carlo se arrepintiera de esta venta. No esperen que este personaje pida disculpas, no lo hará. Y el propio Relaño (el capo), dedica hoy Viernes Portada, segunda página y editorial a este FALSO asunto, llegando hasta dudar de las intenciones del Club al desmentir esta situación.
Escribo todo esto para que, si alguno aún no se da cuenta, vean que este es el verdadero enemigo del Club. Estos periodistas cuyo objetivo no es otro que Florentino Pérez. El entrenador les da igual, para ellos sólo es un daño colateral. Periodistas cuyas intenciones son, o bien apoderarse de este club de socios o destruir los proyectos del mejor presidente que podemos tener, vista la basura que se mueve alrededor del Madrid. Con sus errores y defectos, que los tiene.
Esta es la verdadera batalla que debe librar el madridista. No dejar que esta gentuza pisotee el prestigio de nuestro equipo, no darles cancha y denunciar estas tropelias que lo único que hacen es rebajar al nivel de la bazofia una profesión que tiene excelentes trabajadores en la calle mientras estos imberbes viven de gañote y mentiras a costa de la ignorancia del lector.
¿Queremos que sea esta la gente que informa a la afición de lo que ocurre en el Real Madrid? ¿Nos merecemos este ataque frontal por parte de estos grupos editoriales?
Creo que ya sabéis la respuesta.
SOLOS CONTRA TODOS.
#HalaMadrid.
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