La primera conclusión que podemos extraer de este partido es que tenemos que aprender a gestionar los partidos planteados con una gran exigencia física. El Madrid mantuvo el control del partido, aunque ofensivamente deba todavía producir más fútbol en este tipo de partidos, sin estar preciso ni sólido con la pelota. Hubo fases en que ni siquiera la tuvo ( gran trabajo en la presión del contrario, falta de lectura nuestra en la salida de balón, nunca pusimos pausa para salir jugando ) aunque no concedió ocasiones claras, situación sólo corregida por el buen partido de los centrales en la anticipación.
Tres llegadas en 10 minutos parecerían cambiara el guión previsto: El equipo local saldría a morder al Madrid arriba. Pues bien, fue todo lo contrario, al menos en esos diez minutos primeros. Nos desestabilizó la poca precisión de Xabi Alonso en la salida de balón, no encontraba a Modric ( bien tapado por los centrocampistas rojiblancos ) ni a Benzema ( capital en estas situaciones para dar fluidez al juego ofensivo blanco ), con DiMaria demasiado ocupado de tapar las vías de agua en la banda izquierda ( CR no ayudaba a Marcelo ) y fuera de posición para colaborar en la salida de balón. Iturraspe tenía imán para barrer y encontraba a Herrera con mucha facilidad entre líneas ( Xabi lento sin balón ).
Los laterales bilbaínos en campo contrario, buena salida de balón de Laporte.Tampoco encontrábamos ni a Benzema ni a CR en largo para que aguantaran el balón esperando a que saliera el equipo, siempre perdieron los duelos por alto y por abajo con los centrales. Defendimos muy atrás. Modric muy cerca de Alonso, facilitando la presión y el robo del centro del campo rojiblanco.
El trabajo de ida y vuelta de Rico, hizo el resto. Perdimos el medio del campo y el balón. Daba la sensación de jugarse cómo y dónde quería el equipo local y especialmente donde quería Iturraspe. No sufrimos a balón parado, ni en centros laterales, buen trabajo de Pepe y Ramos.Ritmo frenético del equipo local, que no se tradujo en ocasiones. Sólo una de Aduriz, tras una pérdida infame de Marcelo en banda izquierda, que salió fuera por poco. En ningún momento tuvimos la pausa necesaria para hincarle el diente a la defensa del Athletic.
En la reanudación, todo cambió. Buenos minutos del Madrid, defendimos más arriba, Xabi ganó presencia con balón, tuvo más espacio y empezó a encontrar a Modric y a Karim, con DiMaria mejor en la recuperación y empezamos a atacar con sentido, a encontrar a los hombres de banda y a hacer retroceder al Athletic ( con menos vigor físico que en el primer tiempo ). Hasta el gol de Ibai, partido total y absolutamente controlado, golazo de Jesé, de delantero centro puro tras una recuperación de nuestro medio campo, conexión con Benzema que puso en juego a Ronaldo en velocidad y pase medido de éste para el canterano.
Empató en Athletic tras un despeje de Ramos de cabeza hacia el centro, con un golpeo estupendo de Ibai ( lo repetirá? ) desde el borde del área ( mal defendida la zona de rechace, en segunda jugada ) Para entonces Ander Herrera ya no debía estar en el campo. Ancelotti cambió a Jesé por Illarra ( yo hubiera cambiado a Benzema, dejando al canario arriba para potenciar su velocidad ) y pareció dar por bueno el empate. Morata para presionar la salida de los centrales y Varane para dominar los centros laterales, también saltaron al campo.Ninguna complicación para el Madrid salvó otro despeje de Ramos que salvó Diego, hasta el final del partido.
Lo mejor: No concede ocasiones ( sólo la de Aduriz ) pese a no tener el balón durante buena parte del partido. Los centrales, muy sólidos. El gol de Jesé. 30 minutos buenísimos de la segunda parte. No sufre a balón parado.
Lo peor: Aprender a gestionar partidos físicos y con alto ritmo de juego, tenemos que aprender a poner pausa a estos partidos ( mejor aprovechamiento de los espacios y escalonamiento de jugadores ). Sin Crisitano el ataque desaparece. Aprender a hacer daño a equipos trabajados defensivamente, agresivos en la presión. El arbitraje premeditado de Ayza Gámez, doble rasero en las tarjetas, expulsión inventada de Cristiano ( redacción delictiva del acta ), no dejó sacar una última falta a favor del Real Madrid. Lo de Marcelo es preocupante. Era un partido para Arbeloa.
PD: Si le dan el balón, el equipo sabe qué hacer con él y cómo hacerle daño al contrario. Si le presionan, debe encontrar espacios detrás de esa presión. Es fundamental recuperar las contras.
Hala Madrid!!.
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